Debo confesar que hace unos días tuve una experiencia de lo mas absurda, mas absurdo que el juego de miradas, iba yo, caminando orgullosamente por mi universidad, traía yo engalanándome el mp3 de mi hermano y de un momento a otro una canción se comienza a escuchar, “It’s rainning men” de Geri Halliwell, aquella pelirroja putescona de Spice Girls, no encuentro la razón por la cual esa canción tuvo contacto con una fibra de mi ser, bueno yo creo el hecho de que soy gay. En ese momento mi ánimo subió, ya que lo traía mas bajo que los calzones de una puta y comprendí el significado de los días soleados, en esos pequeños minutos, me sentí en la cima de éxtasis, me encontraba con la frente en alto, viendo directamente al sol, insinuándole mi poder, como si desde el cielo estuviera manipulando el tiempo, esos fueron mis minutos, ese fue mi momento, y nadie puede robármelo y nunca se puede repetir como el primer beso con aquella persona que secuestro tus pensamiento, como la mirada de dos amantes que prefieren callarse sus palabras por miedo a salir lastimados. Por un instante del día las lagrimas de borraron de mi ojos y se dibujo una sonrisa entre mis labios. Esa fue la razón por la cual decidí salirme del hoyo en que habitaba, decidí buscar esa lluvia y empaparme con ella. Con un suspiro de suerte, les deseo que obtengan algún resultado positivo con esta canción.
Si me dieras un beso, me lo pondría en el huesito de la pelvis, justo arriba de la cadera
Referencia Personal
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Interesado en la gloriosidad de la madre naturaleza, en la perfección del padre tiempo, en el misterio del gran kahuna, en la complejidad del hombre, en la sencillez de un suspiro y en el dolor de una lágrima.
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Pues extraño momento, pero al final del día la experiencia es grata.
Saludso desde el Huacal Hombres hombres.